El sol aun brillaba en lo alto, de un cielo intensamente azul...
Caminabamos sin prisas, observando el retoñar de los arboles, repletos de hojitas nuevas, la gente pasaba a nuestro lado, sin llamarnos siquiera la atención, los dos embelezados, viviendo como a solas, nuestro amor, este amor que llego como la misma primavera, a poblar de nuevas ilusiones, nuestros corazones.
Creo que los dos nos fijamos en ella, casi al mismo tiempo... Estaba sentadita, esperando el autobús.
Era un hada...un hada...sin edad...sin tiempo...con su melena enmarañada repleta de blancos cabellos...su vestimenta extraña y su rostro, atraia las miradas curiosas de los que pasaban a su lado.
Vestida con moda de otro siglo...con sombrero...calcetines fucsias...y unos zapatones gastados.
Tenia la cara pintada, colorete en las mejillas, y unas pestañas larguisimas que titilaban y brillaban como las mismas estrellas y al parpadear producian unos destellos azul fosforescente.
Ella parecia no ver a nadie...solo esperaba, y esperaba... Quien sabe que...
Reposaba a su lado un bolso viejo y enorme, del que asomaban flores y una muñeca de trapo, con largas trenzas.
Entre sus manos un libro desgastado con la imagen de un hada.
-Dije a mi amor emocionada...es un hada...Un hada que aun espera a su perdido amor, a pesar del paso del tiempo.
Que poco a poco la fue envejeciendo, sin que se diera cuenta.
Aun conserva intactos sus recuerdos, dentro de su corazón.
Ya no tiene sus traslucidas alas... Ni tampoco a su amado...
No supo encontrar el camino de regreso a su mágico mundo...
Y solo sabe esperar...
Quién sabe... Quizás algun autobús que la lleve de regreso al otro lado...a su mundo...aquel que jamas olvidara.
Norma-Luz del alba
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